Re: Debate abierto sobre cruces (por Louisville)
Foro A Galopar & Turfinternet, 25/11/2004

Ampliando sobre la intervención de Manuel de Luque en el debate inferior (mensaje que debería seleccionarse para la sección de artículos, a mi parecer), aprovecho para aportar unas apreciaciones sobre el tema de la genealogía del pursangre.

Estoy completamente de acuerdo en que el cruce ideal, si puede llamarse tal, es aquel que reúne la mayor cantidad de compatibilidades o indicios no solo de constituir un corredor eficaz, sino además de ser potencial transmisor de esa capacidad.

Es decir, se trata de combinar todas las herramientas de análisis a la hora de establecer un cruce. Como bien indica Manuel, a menudo se cae en el error de teorizar sobre un cruce sin comprobar posteriormente la morfología de los sujetos en cuestión, pues la selección del purasangre se basa en las dotes deportivas, y no en la morfología como sucede en otras razas equinas.

De modo que dos individuos provenientes del mismo cruce pueden presentar morfologías marcadamente distintas. A Federico Tesio se le atribuye con razón haber aplicado una metodología sistemática de combinar orígenes para obtener ejemplares de resultados incomparables tanto en la pista como en su posterior influencia en la raza. Pero cabe recordar que Tesio estuvo en la caballería italiana, donde la morfología cobraba una importancia indiscutible. En definitiva, Tesio entendía de morfología y ante todo sabía combinar dos sujetos en base a sus rasgos físicos.

Otra cosa era la planificación teórica de los cruces. Ahí se destacó por la aplicación sistemática de la fórmula citada por Manuel: "Devolver al semental la mejor sangre de la yegua madre," aunque no nos consta que Tesio hubiera correspondido nunca con Olin Gentry, el maestro de Darby Dan Farm, en Kentucky.

Así hemos enumerado ya 2 herramientas principales a la hora de establecer un cruce: 1ª sendos orígenes y la posibilidad de concentrar sangres deseables según los objetivos del cruce (velocidad, fondo, distancia clásica, etc.), y 2ª la morfología de los sujetos del cruce.

La concentración de sangres puede constituir distintos grados de consanguinidad. La repetición de sujetos dentro de las 5 primeras generaciones se denomina "linebreeding" pero dentro de las primeras 3, ya se considera "inbreeding" o una consanguinidad mucho más directa. La consanguinidad dentro de las 3 primeras generaciones es un tema muy controvertido en la cría del purasangre, con sus partidarios y sus detractores. Históricamente, l criador francés Marcel Boussac, por ejemplo, tuvo muy buenos resultados con el inbreeding.

Antes de constatar la compatibilidad morfológica, hay otras herramientas que pueden aplicarse. Una es el llamado "dosage" o "dosis de herencia," de la que se hizo una breve introducción en este foro. Otra, es el Factor Rasmussen, que analiza "la influencia de yeguas representativas en un cruce a través de productos distintos," completando de esta forma el dosage, cuyo enfoque es esencialmente masculino, siendo todos los "chefs de race" sementales históricamente destacados en la cría mundial del purasangre.

De modo que a la hora de teorizar acerca de un cruce, una metodología a seguir podría ser:

1) Estudio del origen de la yegua, buscando individuos destacados en las primeras 5 generaciones para concentrar sus sangres mediante inbreeding, linebreeding o el factor Rasmussen.

2) Estudio del perfil y parámetros de dosage del cruce hipotético, según los objetivos del cruce.

3) Estudio de compatibilidad morfológica de los sujetos.

¡Continuemos debatiendo!