Pero ¿qué pasó hace 90 años? y el misterio de la foto equivocada (por Manuel de Luque)
Foro A Galopar & Turfinternet, 01/07/2006
El domingo 2 de julio comienza en San Sebastián una nueva temporada de carreras. Y una sociedad privada se ha hecho cargo de la gestión del asunto… Nada nuevo bajo el sol, en realidad. Hace exactamente 90 años, el 2 de julio de 1916, que también era domingo, el hipódromo de Lasarte abría sus puertas para celebrar su temporada inaugural, y el promotor de la aventura era el empresario belga Georges Marquet, titular de la concesión del casino donostiarra, que eso sí, contó con el apoyo decidido del rey Alfonso XIII para montar en pocos meses un hipódromo que acogiera a los caballos franceses, que se habían quedado sin poder competir debido a la guerra.
Llovió mucho aquel día, y mientras el temporal, como recuerdan las añejas crónicas, destrozaba los canotiers de los caballeros, y deslucía las toilettes de las damas, en la pista de arena de Lasarte se hacía historia. Se corría el primer Gran Premio de San Sebastián, sobre 2.400 metros, 100.000 francos de dotación, 26 participantes (“caballos enteros y yeguas de tres años en adelante, de pura sangre y de todos los países”, como rezaban las condiciones) y al final del recorrido un potro castaño de tres años, propiedad de Jefferson Davis Cohn, y montado por R. Stokes, se destacaba del resto y ganaba por tres cuerpos: ese potro era Teddy.
Son consustanciales a la afición a las carreras esas conversaciones, o discusiones, tan entretenidas como inútiles, sobre cuál es el mejor caballo de tal o cual país, de tal o cual época, de tal o cual generación… Seguramente Teddy es el mejor caballo que jamás ha corrido en España pero, en cualquier caso, de lo que no cabe duda es de que ha sido el más importante. No me arriesgo nada al afirmar esto, porque Teddy es, simplemente, uno de los caballos más importantes de la historia del turf mundial: por un lado, fue un espléndido corredor; por otro, estaría en la terna de candidatos si hubiera que elegir al semental más influyente del siglo pasado a escala mundial.
Teddy nació en Francia en 1913. Su criador fue Edmond Blanc, importantísimo propietario y criador cuyos colores azules y naranjas dominaron el turf francés desde finales del siglo XIX y hasta el inicio de la Gran Guerra. A pesar de ello, nunca fue elegido para formar parte del comité directivo de la Societé d’Encouragement, porque los aristócratas que la dominaban por entonces consideraban que el origen de la gran fortuna de Blanc era materia non sancta: su padre, y él después, habían sido los concesionarios del famosísimo y lucrativo Casino de Montecarlo.(cabe pensar que algunos de ésos que le negaron un puesto en la Societé se jugaban gustosos los francos en las mesas de baccarat del Principado…).
Blanc conmocionó el mundo del turf cuando en 1899 pagó 37.500 guineas por el espléndido e irascible Flyíng Fox, ganador de la Triple Corona inglesa para el Duque de Westminster esa misma temporada. Esa cantidad era en ese momento el más alto precio pagado por un PSI y para hacernos una idea de su magnitud baste pensar que no se pagó un pecio superior por un caballo en pública subasta hasta 1967, cuando Vaguely Noble fue rematado en 136.000 guineas.
Blanc estabuló a Flying Fox en su Haras de Jardy, donde conoció un gran éxito. En su primera potrada engendró a Ajax, una de las glorias d e la cría francesa, imbatido en cinco carreras, entre ellas el Prix de Jockey Club y el Grand Prix de Paris. De su cruce con Rondeau, una hija de Bay Ronald que Blanc había comprado en Inglaterra por 4.000 guineas y que hasta entonces sólo había dado caballos malos y foals muertos, en 1913 nació Teddy.
Un año más tarde estalla la Primera Guerra Mundial, las autoridades francesas suspenden las carreras y Blanc decide desmontar su imperio hípico. Gran parte de sus caballos los compra el estadounidense Capitán Jefferson Davis Cohn. La tasación de Teedy, entonces un yearling, fue la principesca suma de 215 libras.
Cohn era un bon vivant, un tipo ostentoso, un aventurero social, ahijado de Jefferson Davis (presidente de los Estados Confederados durante la Guerra Civil estadounidense) que se había instalado en París poco antes procedente de Londres y que disponía de una gran fortuna. Sobre el origen de la misma he leído versiones distintas: una apunta a una herencia procedente de la familia Cohn, banqueros alemanes de origen judío; otra, a que procedía de la herencia de Lord Michelham, del que Davis había sido secretario (y, según los rumores, amante de su mujer y padre de uno de sus hijos). El periodista francés Henry Thethard lo describe así en su libro ‘Histoire et secrets du turf’, editado en 1947: “Este Capitán Cohn era un tipo bastante guapo, de cabellera abundante, que se paseaba por los hipódromos con un paraguas en la mano y cigarro puro en la boca. Debía su fortuna a Lord y Lady Michelham y acerca del asunto se cuenta una historia folletinesca sobre cuya autenticidad hay que tomar muchas precauciones”.
En 1916, cuando Teddy tenía 3 años, las presiones de los criadores francesas hicieron posible la celebración de unas denominadas pruebas de selección, sin premios, ni apuestas, ni público, con el fin de determinar las jerarquías generacionales y conocer cuáles podías los reproductores más aptos de cara al futuro. Teddy ganó con facilidad el Prix des Trois Ans, equivalente del Prix de Jockey Club, y dos carreras más. Llegado el verano, y ante la inauguración de Lasarte, Cohn decide trasladar su cuadra, con armas y bagajes, al nuevo hipódromo. Sus colores blancos, celestes y negros fueron defendidos por cerca de una treintena de ejemplares, que ganaron para el 306.200 pesetas, lo que le convirtió en el propietario líder de la estadística, por delante del Duque de Toledo (nom de course del rey Alfonso XIII).
Teddy fue uno de los cuatro caballos de Cohn que corrieron en aquel primer Gran Premio. De los tres restantes, Spirt fue segundo, montado por el mítico George Stern, uno de los mejores jockeys de la historia. El hijo de Ajax volvió a correr el 17 de septiembre en el St. Leger de San Sebastián, sobre 2.500 metros, y ganó por un cuerpo, delante de su compañero de cuadra Rabanito. Su última carrera en nuestro país fue la Copa del Oro del Rey de España (2400m), disputada dos semanas después, en la que Teddy se coloca tercero por detrás del citado Rabanito y de Inkermann, del Duque de Toledo. En total, el campeón del Capitán Cohn ganó en nuestro país esa temporada 90.000 pesetas en premios.
Su última carrera fue el Prix de Sablonniers, disputada al año siguiente, y en la que Teddy cimentó su fama batiendo al magnífico seis años La Farina.
Al año siguiente, Teddy empieza a ejercer como semental en el Haras de Bois Roussel, propiedad de Cohn, y es esta actividad la que lo convierte, y no exagero un ápice, en inmortal. Espléndido padre de corredores, ganó la estadística francesa en 1923, y fue segundo en 1926, 1928 y 1932, y tercero en 1925 y 1929. Pero esto es casi una anécdota. Aunque sus mejores hijos machos (Asterus, Bull Dog, Sir Gallahad y Ortello), fundaron líneas que se mantuvieron por algunas generaciones, Teddy fue sobre todo un absolutamente maravilloso padre de corredoras y madres. Como simple muestra de lo que sería una materia interminable, decir a este respecto que de su hija La Troienne, criada por Marcel Boussac, descienden más de mil (¡mil!) ganadores de stakes por línea femenina; decir también que será complicado encontrar en estos momentos en el mundo un PSI que no tenga al menos una línea de Teddy (por ejemplo, Baldoria, nuestra chica de moda, tiene 27 líneas del caballo); y comentar por último que gran parte del enorme éxito como semental de Northern Dancer se debe a su cruce con yeguas con sangre de Teddy.
La buena suerte, en forma de herencia, hizo rico a Jefferson Davis Cohn; la mala suerte, escenificada en el crash bursátil de 1929, le arruinó. Ello le llevó a vender prácticamente toda su cuadra de carreras y ganado de cría, incluido el propio Teddy. Éste gozaba de un enorme prestigio en Estados Unidos, donde sus hijos, los propios hermanos Sir Gallahad y Bull Dog, estaban teniendo un enorme éxito como sementales. Por ello, el veterano hijo de Ajax fue comprado en 1931 por los criadores estadounidenses F. Wallis Armstrong y Kenneth Gilpin, que lo instalaron en el Knetmere Stud (Virginia), donde el caballo murió cinco años más tarde, no sin antes padrear, entre otros, a Sun Teddy (origen de la línea masculina del gran Damascus) y Case Ace, que figura en el origen de Raise a Native.
Antes de terminar este largo mensaje, un asunto menor, pero muy curioso. En algunos de los bien pocos libros que sobre la historia de nuestras carreras han visto la luz aparece una foto de Teddy, siempre la misma. Por ser más concreto: en ‘Un tercio de siglo’, en la página 2.4; en ‘Turf 91’, en la página 50; y en ‘Pasión por las carreras. 85 años del Hipódromo de San Sebastián’, en la página 30.
Pues bien, estoy casi absolutamente seguro de que ese caballo de la foto NO es Teddy. Si alguno tenéis los libros citados, podréis ver en la imagen, a pesar de que no tiene una enorme calidad, un caballo del que se puede asegurar, casi sin género de dudas, que es alazán careto. Y aunque sin nitidez, se adivina que es calzado alto de las manos. Pues bien, Teddy era castaño y no tenía más marca blanca, al menos según se aprecia en las fotos que he visto, que una mínima estrella blanca en la frente. Posiblemente estemos ante un error original de archivo en la Sociedad de Carreras de San Sebastián o en la SFCCE que después, por pura inercia, se ha perpetuado.
Estoy haciendo mis averiguaciones con expertos internacionales como Tony Morris y Anne Peters (dejad que me tire un poco el rollo), pero quizá lo más operativo es que si algún forero que viva en San Sebastián tiene ganas y tiempo, se pase por la hemeroteca municipal (yo la consulté hace como mil años, estaba en la Plaza de la Constitución y tenía buenos fondos), consulte prensa de la época y trate de aclarar el asunto. (Tengo escaneada la foto del careto de que os hablo, pero me temo que no la sabré colgar aquí, se la mando por mail a cualquiera que sea competente en el asunto, y todos la podréis ver).
No sé si mañana, en Lasarte, algo rememorará el hecho de que el hipódromo cumple noventa años. Pero no estaría de más que los que os paséis por allí recordéis, por un momento, que por la pista que contempláis galopó hace noventa años uno de los gigantes del turf mundial. Era el 2 de julio de 1916 y llovía, según parece.
Saludos (y disculpas por la longitud)
Respuestas
Re: Fotografía escaneada de "Falso Teddy" (por Intermediario, de parte de Manuel de Luque) - 02/07/2005

Re: Fotografías de Teddy y "Falso Teddy" (por Red Rum) - 02/07/2005
TEDDY:

 

 

Falso TEDDY: